Estas son las peores construcciones de México

No es un secreto que nuestro país es conocido por tener a los funcionarios públicos más corruptos y deshonestos del mundo. Esto se manifiesta en distintos aspectos como la economía, la educación, la infraestructura social, entre otros.

Lamentablemente este último aspecto es uno de los que más se presta a la malversación por parte de los políticos y funcionarios. Y por ende, también es uno de los que más daños causa a la población en diferentes sentidos. 

En este artículo haremos un recuento de las peores construcciones del país. 

Algunas se caracterizan por tener daños que parecen irreparables, otras por su mal funcionamiento a pesar de mantenerse activas y otras simplemente por ser ¨elefantes blancos¨.

¿Qué son los elefantes blancos? construcciones gigantes que a pesar de su alto costo al día de hoy se encuentran abandonadas y son completamente inútiles. 

Ya sea por su alto costo, utilización de material de construcción de dudosa calidad, mal o nulo funcionamiento o por terminar en las peores tragedias; estas son algunas de las peores construcciones en México:

Biblioteca Vasconcelos

Si bien esta biblioteca es una de las más hermosas y estéticas de la ciudad, no se puede negar que tuvo muchos fallos desde que abrió las puertas al público.

Tan solo un año después de haber sido inaugurada, fue clausurada por presentar un riesgo tanto para usuarios como para su acervo cultural. No obstante, veinte meses después volvió a funcionar. 

Cineteca Nacional

Actualmente, la cineteca nacional es uno de los recintos culturales que recibe cientos de visitantes amantes del cine de arte. Sin embargo, en 2014 tuvo que ser cerrada debido a los daños que recibió a causa de las fuertes lluvias. 

Las autoridades tuvieron que cerrar 2 nuevas salas de la cineteca durante 3 días debido al bloqueo de los desfogues de agua. Cabe resaltar que dichas fallas existen desde la construcción del inmueble, que por cierto ya ha sido remodelado y ampliado anteriormente. 

Teleférico 

El primero de su tipo utilizado como medio de transporte público, ubicado en Ecatepec, tampoco estuvo libre de fallas desde su construcción inicial. Tan solo 3 días después de haber sido inaugurado sufrió un corto circuito que dejó a varios usuarios suspendidos en el aire cerca de 30 minutos. 

Estela de Luz

Esta es una que conocemos todos los que vivimos en la Ciudad de México. Inicialmente esta obra sería construida en conmemoración del Bicentenario de la Independencia de México en 2010. Sin embargo no fue inaugurada hasta 2012. 

Además, su construcción estuvo llena de dilemas. Por ejemplo, el presupuesto inicial que era de 393 millones de pesos, terminó ascendiendo a 1,036 millones de pesos, es decir, fue 163% mayor a la cifra inicial. 

De igual forma, debido a su mala construcción se tuvo que invertir en más cemento y en un sistema eléctrico diferente al que se había previsto.

La cereza del pastel fue que a pesar de que se había contemplado obsidiana para su edificación, esta fue sustituida por un material de construcción mucho más barato: la tablaroca. 

Senado de la República

Tal parece que nada que tenga que ver con los políticos en México trae buenas noticias. Y el edificio que alberga al senado de la república no es la excepción. Este recinto ubicado en Reforma también mostró fallos desde su inauguración. 

Entre los muchos problemas que presenta el recinto, destacan las goteras, inundaciones en el salón de plenos y las oficinas de presidencia, mala distribución de oficinas, mal material de construcción en los escalones principales, falta de baños, entre otros defectos que los senadores han reportado. 

Villa Panamericana Guadalajara

Esta villa construida para albergar a los participantes de los Juegos Panamericanos Guadalajara 2011 es un claro ejemplo de una construcción denominada elefante blanco.

A pesar de que esta obra tuvo un costo aproximado de mil 200 millones de pesos, permaneció por muchos años completamente abandonada. No fue hasta 2019 que se planteó vender estos departamentos con uso habitacional. 

Sin embargo, también es importante recalcar que la construcción de esta villa panamericana no solo representó un enorme desperdicio de dinero.

También suscitó un ecocidio debido al área en que fue edificada. El alejamiento de la vida silvestre y la disminución de la superficie de infiltración pluvial que erosionó el suelo, fueron algunas de sus consecuencias ambientales. 

Línea 12 del metro

Esta línea inaugurada apenas en 2012, presentó desperfectos desde sus inicios. De hecho siempre fue catalogada como una construcción con fallas en su estructura que provocaban un desgaste anormal en los rieles. 

Debido a esto, se encontraba constantemente mantenida y para ello demandaba 200 millones de pesos al año. 

Su inversión inicial fue de 17 mil 500 millones de pesos, pero la cantidad final fue de 24 mil 500 millones de pesos.

Por otro lado, la construcción estuvo a cargo del consorcio conformado por ICA, SAB de CV, Alstom Transport, SA, Alstom Mexicana, SA de CV y Carso Infraestructura y Construcción, S.A. de C.V.

Hasta hace unas semanas, la ¨línea dorada¨ como muchos la conocen actualmente, permitía que personas que habitan en la periferia de la Ciudad de México se integraran al centro de la ciudad con un transporte público de calidad que les ayudaba a acortar distancias. 

Sin embargo, la noche del lunes 3 de mayo esto cambió drásticamente cuando una viga del puente elevado del metro entre la estación Olivos y Tezonco cedió y provocó que el metro se desplomara y cayera en forma de V sobre la avenida. 

¿Las razones?

Cuarteadas en trabes, mala calidad del material de construcción, desgaste en tramos curvos, entre otros problemas que fueron detectados desde el inicio de la obra e intensificados con el uso de este transporte y los temblores de la ciudad. 

Debido a que el accidente ocurrió un lunes a las 22:22 horas, se calculó inicialmente que había aproximadamente 70 personas en los vagones del metro. Sin embargo, hasta el momento la cifra de heridos asciende a casi 80 mientras que la de personas fallecidas es de aproximadamente 25. 

En el metro viajaban hombres, mujeres e incluso niños y niñas de clase media y media baja que regresaban del trabajo o de ver a sus seres queridos y que ansiaban regresar a su hogar para cenar y descansar después de un largo y duro día. Lamentablemente, muchos de ellos no lograron llegar. 

No cabe duda que esta tragedia no es más que un reflejo de la corrupción y negligencia por parte de los funcionarios y constructoras que en su tiempo estuvieron a cargo de esta obra pero también de aquellos que no le dieron un correcto mantenimiento. 

Hasta ahora el gobierno ha comunicado que la investigación y peritaje del accidente en la línea 12 será realizado por la empresa DNV situada en Noruega.

Y manifestó su compromiso por llegar a las causas y responsables de esta tragedia. La cual ha sido catalogada como la peor que ha sufrido la capital desde el terremoto del 19 de Septiembre del 2017. 

Como puedes ver, los factores que llevan a que una obra sea considerada un desastre total son variados. Desde una mala planificación para su uso hasta daños derivados del material de construcción utilizado.

El problema aumenta aún más cuando se trata de obras públicas que afectan directamente a la clase trabajadora y que terminan por exponer su vida a costa del enriquecimiento de la clase política. 

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