Aspectos a considerar antes de someterse a un aumento de busto

El aumento de mamas o busto, seguido de la cirugía de nariz y la liposucción son las tres cirugías estéticas más solicitadas a nivel mundial de acuerdo a cifras de la UNAM.  

Antes de considerar siquiera reservar una cita con el cirujano plástico en Monterrey hay una serie de elementos y situaciones que se tienen que plantear para tomar una decisión consciente y no fruto de un arrebato, como también suele suceder:

• Es un procedimiento quirúrgico, y por ello hay unos riesgos inherentes a toda cirugía que debe conocer, lo anterior debe ser explicado por el médico ya que incluso la cirugía estética tiene límites y no todas las personas son candidatos a todas las cirugías aunque puedan costearlo.
  
  
• Una cirugía plástica de senos es un producto que como cualquier otro material puede deteriorarse con el paso del tiempo y requerir una nueva intervención quirúrgica, la intervención no es la única ocasión en que verá a su médico.
  
  
• El hecho de ser portadora de un implante mamario implica que debe someterse a controles de dicho implante para detectar eficazmente cualquier circunstancia anormal.
  
  
• Una prótesis mamaria puede sufrir una contractura de la cápsula generada por el cuerpo y ocasionar deformidad y dolor.
  
  
• Puede infectarse, extruirse, romperse e incluso de forma excepcional, relacionarse con otras enfermedades.
  
  
• Si usted es muy joven, debe plantearse diferir el tratamiento, puesto que los mejores resultados se obtienen con un desarrollo mamario completo, esto es, por lo general después de los 20 años.
  
  
• Debe ser emocionalmente madura y estar convencida de someterse a este procedimiento una vez conocidas todas las circunstancias que lo rodean.
  
  
• Debe tener expectativas realistas sabiendo que su aspecto físico se verá modificado, el especialista deberá orientarle sobre el tipo de resultado de forma clara y precisa, si algo es demasiado bueno para ser verdad, quizás no lo sea.

Adicionalmente, es importante destacar que cualquier intervención quirúrgica tiene un riesgo además de un costo económico por lo general, algo elevado. Uno nunca debe arriesgar su salud en caso de un médico no certificado, aunque prometa que puede hacer milagros a un costo muy por debajo del promedio.